martes, septiembre 19, 2006

...

Despierto después del tremendo
choque entre los restos retorcidos de mi coche. Sobre mí se inclina Frank, mi
amigo de la infancia, tratando de reanimarme. -Pero Frank -murmuro débilmente-,
si tú estás muerto... Frank me responde con amable embarazo: -Y tú también.

M.R. James